La entrevista
de
ventas:
El seguimiento después de la entrevista
El seguimiento es una parte crítica - y frecuentemente descuidada -
del proceso de venta
Por Edgardo Frigo
El SEGUIMIENTO es una parte crítica del proceso de venta, frecuentemente
descuidada. Aún cuando se haya logrado un acuerdo satisfactorio, esta etapa
nos permite asegurarnos de que el cliente continúa satisfecho con el
servicio (o no, y nos brinda la oportunidad de proponer acciones
correctivas). También es una fuente inagotable de otras referencias
comerciales.
Llamamos al cliente o lo visitamos en el plazo estipulado después de la
venta, le agradecemos su compra y averiguamos sobre su grado de satisfacción
con el servicio.
Puede ser que todo haya funcionado de acuerdo con lo esperado o mejor aún.
¡Magnífico!
También puede ser que el cliente tenga reclamos o inquietudes. Aquí es
importante escuchar con atención para comprender la verdadera naturaleza del
reclamo, asentarlo por escrito, resolverlo o plantear la resolución ante
quien corresponda, y hacer un seguimiento cuidadoso. Abandonar el
seguimiento de un reclamo es abandonar al cliente.
A clientes satisfechos, les pedimos referidos. ¿A qué otra persona puede
serle útil este servicio? ¿Podemos mencionarlo como referencia?
El seguimiento es sobre todo una cuestión de método y constancia, y es fácil
darse cuenta de que se está haciéndolo bien. En este caso todos los clientes
reciben llamados de seguimiento en el plazo estipulado, todos los reclamos
quedan asentados en la carpeta de cada cliente, son respondidos con rapidez
y se verifica la reacción del cliente, y siempre se pide referencias a los
clientes satisfechos.
SEGUIMIENTO DE CASOS “DIFÍCILES”: EL CLIENTE IRRITADO
Aunque hagamos todo lo posible por lograr que nuestro servicio sea perfecto,
en algunas ocasiones no lo conseguiremos. Frente a esto algunos clientes se
irritarán, y quizás alguno se pondrá directamente furioso. ¿Qué hacemos en
este caso? El primer paso es no “achicarnos”. Los problemas son una parte
natural de los negocios, menos gratas que otras... pero una parte al fin.
En principio hay que poder ponerse en el lugar de ese cliente y mostrar
comprensión por su problema. Luego hay que tratar de entender el motivo de
su irritación, del único modo posible: preguntando. Muchas veces el cliente
tiene razón. En ese caso, désela. Luego comprométase a hacer algo para
satisfacerlo... y hágalo. Haga un seguimiento cuidadoso del tema, y mantenga
al cliente al tanto de sus acciones.
En estos casos la actitud que mostramos frente a los problemas de los
clientes es esencial para garantizar una buena respuesta, incluso aunque el
problema no pueda resolverse. La actitud positiva, el seguimiento cuidadoso
y la comunicación permanente y honesta con el cliente pueden hacer milagros.
SEGUIMIENTO Y COMUNICACIÓN
Los mejores profesionales de ventas son excelentes comunicadores. Ahora
bien: para lograrlo no hace falta ser locutor, político ni orador brillante.
Como casi todo en ventas, la comunicación se relaciona con honestidad,
método y práctica.
En cuanto a la honestidad hay poco por decir: las exageraciones,
ocultamientos o mentiras siempre terminan descubriéndose, con frecuencia del
peor modo y en el peor momento.
Y en cuanto al método hay muchos libros sobre el tema. Pero lo más útil es
mantener –con todos, pero en particular con los clientes, potenciales
clientes y posibles derivadores de clientes– una comunicación tan amplia,
continua y profunda como sea posible.
Esto significa:
-- no dejar comunicaciones sin responder: cartas, llamadas, faxes o E-mail
(nunca, de nadie, y aunque la respuesta sea muy breve o negativa),
-- mantener registros cuidadosos (nuestro archivo es un recurso crítico), y
sobre todo
-- esforzarnos por resolver los problemas de nuestros clientes.
Este esfuerzo honesto es visible para ellos, (aunque no se consiga el
resultado) y lo premian con lealtad y con recompra.
EN SÍNTESIS
Mejorar nuestras ventas requiere aumentar nuestra exposición (número
de contactos con potenciales clientes) y nuestra tasa de aciertos, el índice
de ventas en esos contactos.
El resultado es un efecto multiplicador entre ambas, una sinergia que
aumenta las ventas.
El marketing nos ayuda a mejorar nuestra eficiencia. La buena técnica de
ventas mejora nuestra efectividad.
La venta es un proceso secuencial, una de cuyas partes
críticas es la entrevista de ventas. A su vez la entrevista incluye tres
pasos:
-- preparación
-- desarrollo de la entrevista y acuerdo subsecuente, y
-- seguimiento.
Cada paso es importante para lograr una percepción adecuada por parte del
cliente, y para el éxito. Como hemos visto, los procesos profesionales
de venta no incluyen trucos ni magia, ni requieren condiciones personales
particulares.
Más bien se trata de perseverar en procedimientos sencillos pero
prácticos, orientados a lograr transacciones beneficiosas para ambas partes,
y que mejoran drásticamente nuestra tasa de éxitos en la ecuación mencionada
al principio.
Y, como todo, nuestra técnica de ventas mejora con la práctica, así que...
¡a practicar, y buena suerte!
El
autor, Prof. Edgardo Frigo, consultor especialista en gerencia de
Seguridad,
preside
el Foro Latinoamericano de Seguridad.
Vea
sus antecedentes en www.forodeseguridad.com/frigo.htm